Por: Staff de agua&ambiente

Introducción: Ciudades submarinas
Es probable que la Tierra tal y como la conocemos esté a punto de cambiar. Si el aumento del nivel del mar provoca que nuestras ciudades se inunden, si el cambio climático nos impide cultivar alimentos para dar de comer a miles de millones de personas o si ocurre algún otro desastre apocalíptico que ni siquiera podemos avizorar, los humanos necesitaremos un nuevo hogar.
Los arquitectos de Shimizu Corporation, una empresa con sede en Tokio, quieren construir ciudades submarinas llamadas «Espirales Oceánicas». Hasta el momento no se han concretado los planes para construirlas, pero según estima el autor principal del proyecto, Masaki Takeuchi, cada una costaría unos 26 mil millones de dólares.
Los modelos de estas ciudades son realmente fantásticos
Si el proyecto de construcción sigue adelante, la primera «Espiral Oceánica» se construiría frente a la costa de Tokio, a casi 5 mil metros bajo el nivel del mar, comentó Takeuchi a «Business Insider».
Respecto a su distribución, se encontraría dividida en tres partes, cuya zona superior sería destinada a fines residenciales, mientras que la base se emplearía para investigar y explorar nuevas formas de aprovechamiento de los recursos energéticos del fondo marino. En la parte más cercana a la superficie se hallaría una esfera de 500 metros de diámetro, donde se emplazarían un hotel, un centro comercial y algunas viviendas. Un domo flotante que estaría conectado con el resto de la ciudad gracias a una espiral proyectada que permitiría la inmersión en la urbe submarina y que al mismo tiempo, serviría de punto de anclaje.
Residencias, oficinas, laboratorios, restaurantes y escuelas

La espiral de casi 15 kilómetros de largo se encargaría de convertir la energía para que la esfera en la parte superior pueda usarla. Las turbinas gigantes estarían ubicadas en el fondo del océano y extraerían la energía de las olas, las mareas y las corrientes. Dentro de la esfera, habrá unidades residenciales, oficinas, laboratorios, restaurantes y algunos colegios. Se estima que en la esfera podrían vivir unas 5,000 personas. Y con 75 pisos de altura, trataría de acabar con uno de los grandes problemas de la arquitectura en Japón: la falta de espacio. De hecho, la capital Tokio, detenta actualmente el tercer precio más alto del suelo por metro cuadrado por detrás de Hong Kong y Singapur.
Energía 100% renovable

Takeuchi asegura que la ciudad estaría completamente a salvo de los depredadores. Los arquitectos estiman que el sistema podría generar suficiente energía para abastecer a todas las personas que vivirían en la ciudad. Los diseñadores creen que la «Espiral Oceánica» sería un hábitat más respetuoso con el medio ambiente ya que la comunidad utilizaría energía 100% renovable. Si los proyectos siguen adelante, se estima que la ciudad podría estar terminada en 2030.
Fuentes alternativas de energía
El proyecto contempla utilizar micro-organismos que convierten el carbón en metano, mientras que se contará con generadores de energía a lo largo de la espiral, que usarán las diferentes temperaturas del agua marina para crear energía adicional, en un proceso conocido como Conversión de Energía Térmica Oceánica. Además, se producirá agua desalinizada que será bombeada hacia la zona residencial. Teniendo en cuenta que los océanos cubren el 70% de la superficie de la Tierra, los arquitectos afirman que la profundidad del mar ofrece un enorme potencial para las fuentes alternativas de energía.
«Sin embargo, aún no hemos aprovechado ese potencial. Por eso, propongo este nuevo desafío para el futuro», comentó Takeuchi.
La idea cuenta, además, con el asesoramiento de la Universidad de Tokio y de la Agencia Japonesa de Ciencias Marinas y Tecnología (Jastec), aunque Shimizu Corporation espera obtener la financiación privada y gubernamental para materializarla.